VIDELA , Dixit…
“Los enemigos de ayer están hoy en el poder y desde él intentan establecer un régimen marxista, a la manera de Gramsci, que puede estar satisfecho de sus alumnos”. –
"No hubo un plan pero sí acciones autónomas y asistemáticas" (...) "Si la sustracción de un menor tuvo lugar ello no respondió a una orden encuadrada en un plan sistemático emanado de cuadros superiores de las Fuerzas Armadas". –
"Lo más grave es haber enrostrado al Ejército de manera indirecta la autoría de un plan que no existió. Es mi deseo reivindicar al Ejército Argentino respecto de este agravio irracional y gratuito-
"Todas las parturientas a quienes respeto como madres eran militantes activas de las maquinarias del terrorismo y muchas de ellas usaron a sus hijos embrionarios como escudos humanos al momento de ser combatientes- Volvió a autodefinirse como un "preso político" en un juicio "que amenaza convertirse en una farsa para satisfacer políticas de quienes nos gobiernan, farsa que requiere habilidades histriónicas que no poseo-
"Asumo en plenitud mi responsabilidad castrense en todo lo actuado por el Ejército en la guerra interna contra la subversión terrorista". –
"El tribunal carece de competencia y jurisdicción para juzgar hechos protagonizados por el Ejército en la guerra contra el terrorismo subversivo". - "Hoy las instituciones están muertas, paralizadas, mucho peor que en la época de María Estela Martínez de Perón". –
“Hacía falta una medida de fuerza y la gente compartía esa visión. Si nosotros no lo hacíamos, el vacío de poder iba a ser aprovechado por la subversión para llegar al poder y ocupar todo el espacio dejado por otros. Así de sencillo-
“Nuestra intención era ayudar a enderezar el rumbo y teníamos previsto qué es lo que había que hacer con urgencia. Salimos a hacer lo que creíamos que había que hacer y estaba en nuestros planes”. -.
Éramos uno de los países más seguros del mundo, caminábamos en la mejor de las direcciones- “Tuvimos la suerte de organizar este evento en un momento en que la amenaza terrorista había sido doblegada.
Además, para congratularnos más, Argentina ganó ese campeonato mundial y, al margen de que habíamos ganado, el país mostró su capacidad de organización en un corto tiempo”. –
“Mi relación con la Iglesia fue excelente, mantuvimos una relación muy cordial, sincera y abierta. No olvide que incluso teníamos a los capellanes castrenses asistiéndonos y nunca se rompió esta relación de colaboración y amistad”.
- “Los empresarios también colaboraron y cooperaron con nosotros. Incluso nuestro ministro de Economía de entonces, Alfredo Martínez de la Hoz, era un hombre conocido de la comunidad de empresarios de Argentina y había un buen entendimiento y contacto”. –
- “Hay una gran disparidad en las cifras que se ofrecen, como usted dice, lo cual le resta credibilidad a lo que se presenta o se intenta hacernos creer. No se puede pasar de un extremo a otro, es decir, de 32.000 que presentan algunos a 7.000 cifrado por otras comisiones. Creo que este asunto tiene mucho que ver con las compensaciones o el resarcimiento económico que se le dio a las víctimas, o a los supuestos desaparecidos, y en este caso sólo se presentaron 7.000 personas para reclamar lo que les correspondía. Y esa indemnización era de 240.000 dólares por cada caso probado, una cifra nada despreciable, desde luego. Esa es la cifra real porque estamos hablando de la época del presidente Menem y la gente no tenía miedo ya de presentarse abiertamente para hacer sus reclamos. Los militares habíamos desaparecido ya de la escena política. Esa es la ealidad, 7.000, frente a los 30.000 que reclaman las Madres de Mayo. ¿Cómo es posible que 3.000 personas renunciaran a esa ayuda? Este dato demuestra que asistimos a una clara manipulación en el asunto de los desaparecidos, se trataba de alterar las cifras con un sentido político o con el interés de conseguir fraudulentamente una indemnización del Estado argentino. Fue un error de nuestra parte aceptar y mantener en el tiempo el término de desaparecido digamos como algo así nebuloso; en toda guerra hay muertos, heridos, lisiados y desaparecidos, es decir, gente que no se sabe dónde está. Esto es así en toda guerra”. –
Estas palabras pertenecen a J R Videla, Presidente de la junta de gobierno que se hizo cargo del País a partir de la Dictadura implantada en marzo del 76.
Las consideraciones hechas y por hacer de parte de cada uno de los que lean este manifiesto serán propias.
Simplemente me siento en la necesidad de dar mi testimonio de esos años.
Pertenezco a una familia que me educó con espíritu socialista, más cerca o lejos de las ideas políticas, esa época fue para mí, de un oscurantismo interminable.
Terminaba mi secundario y me embarcaba en mis estudios Universitarios, ya en el 76`cursaba mi primer año en la carrera de Arquitectura de la UBA. En ese entonces la Ciudad Universitaria de Núñez estaba a pasos de La ESMA y había pleno control del Ejército en la zona.
La policía solo estaba para organizar “la requisa” de entrada al Pabellón 3. Sistemáticamente todos los días de clases se ingresaba y haciendo fila, se apartaba a cada uno hacia unas mesas puestas tipo cuarto de votación precario y allí se revisaba no solo los petates de cada uno sino que se lo “palpaba de armas”. Esto por espacio de 4 (CUATRO) años fue así de Lunes a Sábado, porque los sábados teníamos clases de 8 a 18 horas.
Muchas fueron las veces que fui requisado en la calle y al responder que era estudiante de Arquitectura era inmediatamente separado hacia un costado, teniendo que dejar los magros pesos que podía utilizar en mi salida con alguna chica, para lograr que me dejaran ir. Si salía con el auto de mi viejo, con quien trabajaba en la construcción, aprendí a no dejar ni herramientas ni bolsas con escombros, para evitar ser “derivado” a una Seccional policial a explicar. Laburaba toda la semana y las ganancias eran pobres, igual que la economía de mi casa junto a mis viejos y eso que la época del “déme 2” la pasamos en austeridad.
Muchos de mis compañeros de secundaria y de facultad, desaparecieron de un día para otro sin motivo y con los que tuve la suerte de conversar casi tenían un pie en el vehículo que los sacara del país. Lo único que me motivaba intelectualmente era la radio (música) y la revista Humor (opinión periodística). Recién hacia los 80`la situación empezó a cambiar todo por merito de los gobernantes de turno que no paraban de hacer cagadas. A fines del 79 viaje a Uruguay y pude ver el descontento en otros países. Me pase una tarde entera en un cine de Montevideo, viendo películas que acá no llegaban. Llegue al limite con Brasil y descubrí otro país. Después y antes del 82`participé de un grupo preservacionista que trato de impedir la demolición de varios centros que se hubieran transformado en Monumentos históricos. Luego llego el gobierno de Leopoldo “White Horse” Galtieri y su terrible error de Malvinas.de allí en mas el declive paso a caída libre hasta la apertura política. Estoy contando solo partes minúsculas de mi vida en esa época, que también me marco a fuego haciéndome sentir como preso, pero sin límites espaciales.
Celebre el Juicio a Las Juntas y aplaudo todavía el “Nunca mas…”y condeno a este Señor Videla a la pena de pensar en el daño irreparable que le hizo a una generación ( o varias…) a partir de su mesianismo energúmeno y de pocos cojones sin una Ballester Molina al lado.
Sus palabras me dan una infinita pena por su demencial estado y una bronca inconmensurable por su accionar marginal.
Nada mas lamentable que le digan a alguien “pobre viejo , hijo de Puta…”
